16 Dic Contaminación atmosférica difusa en España: evaluación por municipios
Contaminación atmosférica difusa en España: evaluación por municipios
Respirar aire insalubre causa más de ocho millones de muertes prematuras al año en el mundo. La relevancia de las emisiones contaminantes de fuentes difusas, como el tráfico, la calefacción doméstica o el sector agropecuario, a veces se considera poco importante o pasa desapercibida, y su control parece más difícil. Sin embargo, son posibles medidas para proteger la calidad del aire y la salud pública. Es imprescindible el impulso desde las Administraciones, en particular las entidades locales. Por primera vez en España se usa información de alta resolución espacial de las emisiones por unidad de superficie a nivel local, de cinco contaminantes de todas las fuentes difusas, y se clasifican los municipios según estas emisiones. Barcelona, con 6,6 toneladas de partículas emitidas por kilómetro cuadrado, es el municipio con una situación más preocupante respecto a esta fuente de contaminantes. Al menos 16,4 millones de personas viven en España en 229 municipios con emisiones altas o muy altas de contaminación difusa. Urge informar, concienciar y actuar.
La contaminación atmosférica, junto con el cambio climático o la pérdida de biodiversidad, es uno de los principales retos a los que se enfrenta la humanidad. Las emisiones contaminantes procedentes de
fuentes difusas a veces permanecen en un segundo plano, a pesar de su influencia negativa sobre la calidad del aire. La contaminación atmosférica difusa puede reducir la calidad del aire, deteriorar la calidad ambiental y afectar a la población humana, así como a otros seres vivos y a los procesos ecológicos. Un estudio reciente estima en 8,8 millones las muertes prematuras anuales por contaminación del aire en el mundo, 790.000 en Europa, 48.000 en España.
Por lo tanto, las emisiones de fuentes difusas, uno de los factores determinantes de la calidad atmosférica, requieren una mayor atención y considerar su magnitud y distribución territorial. En el marco del proyecto IMPACTSIG, la Fundación Matrix ha realizado un análisis geoespacial de las emisiones difusas de contaminación atmosférica, prestando especial atención a la vulnerabilidad de la población en España.
La contaminación procedente de fuentes difusas es aquella cuya fuente de emisión no es puntual, es decir, se origina en áreas o líneas. Frente a las emisiones de fuentes puntuales, como por ejemplo las instalaciones de una industria concreta, cuyo foco de emisión es fácilmente identificable, las emisiones de fuentes difusas tienen un origen de emisión más difícil de localizar. Algunas de las fuentes de emisión de contaminación atmosférica difusa más habituales son las vías e infraestructuras de transporte (carreteras, autovías, puertos o aeropuertos), los campos de cultivo o las instalaciones ganaderas. Otra fuente de emisión difusa son las áreas urbanas, en las que las emisiones debidas a la combustión residencial (calefacción y cocina, principalmente) representan una fuente dispersa de emisión a lo largo y ancho del área ocupada por el núcleo urbano.
Tráfico en Barcelona. Fuente: Pixabay
Entre los contaminantes atmosféricos más habituales se encuentran las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), los óxidos de nitrógeno (NOx), el dióxido de azufre (SO2), el monóxido de carbono (CO) y el amoniaco (NH3). Algunos de estos contaminantes tienen efectos relevantes sobre la salud o sobre el medio. Sus efectos más habituales sobre la salud humana son las enfermedades respiratorias crónicas (asma o bronquitis crónica, entre otras) y las afecciones agudas, y la aparición o agravamiento de enfermedades cardiovasculares. En cuanto a los efectos sobre el medio ambiente, destacan los efectos oxidantes del ozono –contaminante secundario producido por reacciones fotoquímicas desde otros– y los problemas de acidificación y eutrofización, asociados a contaminantes como el amoniaco, los óxidos de nitrógeno y el dióxido de azufre.
En los ambientes urbanos destaca el tráfico como principal emisor de contaminantes, especialmente de óxidos de nitrógeno y partículas, además de dióxido de carbono, uno de los principales gases de efecto invernadero. Otra fuente de importancia en áreas urbanas son las calderas de calefacción doméstica, que emiten óxidos de nitrógeno y óxidos de carbono. En las áreas menos urbanas aparecen otras fuentes de emisión, como el transporte marítimo o aéreo, por un lado, o las asociadas a la producción agropecuaria de las áreas rurales. En este último caso, se trata de una fuente muy dispersa, pero que puede contribuir de forma muy notable en las emisiones de contaminantes como el amoniaco o las partículas en suspensión.
Torres Kio, Madrid. Fuente: Pixabay
La gestión de la contaminación atmosférica, en un contexto de cambio climático, requiere especialmente un conocimiento exhaustivo de sus fuentes y factores moduladores. Por ello, un análisis espacial de las emisiones procedentes de fuentes difusas es una herramienta útil para la evaluación de la contaminación atmosférica y la calidad del aire. De esta forma, se pueden identificar los principales focos de emisión de cada contaminante con alta resolución espacial, proporcionando información de gran interés para proteger la salud pública, en particular a nivel municipal. Además, se pueden localizar los lugares donde coinciden valores elevados de emisión para varios contaminantes, que podrían causar impactos acumulativos o sinérgicos sobre la población y el medio ambiente.
INTERACTIVO – Visor cartográfico: visualizar el mapa pulsando el botón de pantalla completa
Clasificación de municipios por su contaminación difusa
Aunque valiosos, los datos de calidad del aire de concentraciones registradas en estaciones de medida son representativos de puntos concretos seleccionados según la normativa mediante un muestreo selectivo en las “zonas y aglomeraciones que registren concentraciones más altas”, y obtenidos en momentos específicos o son valores medios de determinados periodos. No son representativos de áreas, como el conjunto del área edificada de cualquier población. Con frecuencia sus fuentes de emisión son mixtas (puntuales y difusas), asociadas en especial a industrias y al tráfico, y se excluyen otras fuentes.
No se conoce una clasificación multivariante y sintética de la contaminación difusa en España basada en indicadores de emisiones por unidad de superficie, es decir toneladas de contaminante por kilómetro cuadrado (t/km2).
Con este fin se consideraron datos de emisiones brutas por unidad de superficie (5 x 5 km) de España peninsular y Baleares, derivados del Registro de emisiones y transferencias de contaminantes de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA). Son más fiables que los datos puntuales de concentración en el aire para análisis espaciales. Son datos de la emisión anual en 2008, obtenidos mediante una modelización basada en información geoespacial. Representan las circunstancias y niveles actuales de las emisiones de cinco contaminantes atmosféricos (PM10, NOx, CO, NH3 y SO2) de fuentes difusas. Se ha estimado para cada uno de los municipios, considerando su área urbana, por tanto, las emisiones del territorio donde reside o desarrolla más actividad la población. Además, las medidas de promedios de evaluaciones con datos de concentración en el aire a nivel nacional o autonómico solo han registrado una tendencia ligera de descenso temporal para algunos contaminantes, pero no se sabe si en todos los lugares, y a veces se ha observado un aumento reciente.
La clasificación multivariante de los municipios sintetiza sus diferentes emisiones de contaminación difusa. Aparece en el mapa del visor cartográfico. Se han identificado siete clases o grupos de municipios, que distribuyen de forma heterogénea en la Península.
La mayoría de los municipios con poca población presentan emisiones bajas o muy bajas, y ocupan una superficie total de 434.185 km2 y el 82% del total de municipios estudiado (8.034). El grupo de emisiones muy bajas se encuentra en las zonas de montaña (Pirineos, Sistema Central, Picos de Europa) y en zonas con muy baja densidad de población. Son ejemplos Calamocha (Teruel), Sabiñánigo (Huesca) y Trujillo (Cáceres). El grupo de emisiones bajas, se encuentra en las zonas de la Meseta central, interior de Galicia e interior de Andalucía. El grupo de emisiones bajas pero relativamente altas de amoniaco predomina en el interior de Cataluña y en la provincia de Huesca.
Torla. Fuente: Google Maps
El grupo de emisiones medias predomina en determinadas áreas metropolitanas o costeras muy urbanizadas, con una distribución muy limitada, como la costa mediterránea, País Vasco, y la Comunidad de Madrid, entre otras, y comprende 719 municipios, como Elche, Alcalá de Henares y Vitoria, casi el 9% del total.
Los municipios que concentran la mayoría de población presentan niveles de emisiones considerables, son el 2,85% del total. El grupo de emisiones altas aparece en municipios como Madrid, Zaragoza, Málaga y Valencia, y en algunos otros de menor tamaño, como Pamplona, Oviedo y Vigo, por ejemplo. El grupo de emisiones altas y con especial importancia de dióxido de azufre, se encuentra limitado a zonas portuarias del suroeste de Andalucía y de la ría de Bilbao. Por último, el grupo de emisiones muy altas se encuentra principalmente en el área metropolitana de Barcelona.
Trasatlántico en la Ría de Vigo
Cifras de emisiones difusas y concienciación
La Ley 34/2007, de calidad del aire y protección de la atmósfera, establece que corresponde a las entidades locales ejercer aquellas competencias protección de la calidad del aire atribuidas por su legislación específica, la legislación básica estatal y la legislación de las Comunidades Autónomas. La Fundación Matrix compartirá los presentes resultados de forma pormenorizada con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), por el interés para los planes actuación ante las emisiones contaminantes difusas de cada termino municipal. También lo dará a conocer al Ministerio para la Transición Ecológica. El Programa Nacional de Control de la Contaminación Atmosférica (PNCCA) 2019-2022 del MITECO, considera esencial la información y concienciación sobre esta materia para promover la participación de la población.
La contaminación por partículas es una de las principales variables, junto con los óxidos de nitrógeno y el monóxido de carbono, que determina la variabilidad de las emisiones difusas entre municipios y los grupos definidos mencionados. Las emisiones no son totalmente independientes entre sí, y existe cierta asociación entre contaminantes y sus niveles de emisión, aunque modulada por factores geoespaciales. Los grupos sintetizan la variabilidad existente en la cantidad total de emisiones de cada contaminante entre municipios. Para que se entienda mejor, se exponen algunas cifras y casos muy ilustrativos.
El récord de emisiones de partículas lo ostenta Barcelona, con 6,6 t/km2, seguida de Santa Coloma de Gramenet (6,2). Entre 4 y 5 t/km2, aparecen otros municipios de muy alta contaminación difusa, como Esplugues de Llobregat, L’Hospitalet de Llobregat, Sant Just Desvern y Sant Adriá de Besós. Todos estos municipios pertenecen al grupo de emisiones muy altas.
Entre 1,5 y 2,8 t/km2 están Pamplona (2,8), y otros municipios como Madrid y su área metropolitana (Leganés, Parla, Pozuelo de Alarcón, Alcorcón, Fuenlabrada, Coslada), algunos del área metropolitana de Bilbao (Bilbao, Barakaldo, Getxo) y del área metropolitana de Barcelona (Badalona, Viladecans, Sant Cugat del Vallés, El Prat de Llobregat), así como Sabadell, Manresa, A Coruña, León y Salamanca. Con más de 50.000 habitantes, y de 1 a 1,5 t/km2, son los siguientes 16 municipios: San Sebastián, Oviedo, Gijón, Vigo, Burgos, Palencia, Getafe, Alcobendas, Guadalajara, Zaragoza, Girona, Castelldefels, Mollet del Vallés, Terrassa, Paterna y Granada. Todos estos municipios pertenecen al grupo de emisiones altas.
La mayor parte del territorio peninsular corresponde a municipios con una emisión de partículas inferior a 0,15 t/km2.
El PNCCA prevé para 2022 una reducción del 66% de las emisiones de óxidos de nitrógeno. Las clases de altas o muy altas emisiones contaminantes difusas, agrupan municipios que emiten un promedio de más de 10 t/km2 de óxidos de nitrógeno. Barcelona, Santa Coloma de Gramenet, L’Hospitalet de Llobregat y Esplugues de Llobregat superan las 30 t/km2. Entre los municipios con emisiones de más de 15 t/km2 de este tipo de contaminante pueden mencionarse Bilbao, Barakaldo, Madrid, Leganés, Parla, Badalona y Sant Cugat del Vallés (todos de más de 60.000 habitantes), entre otros.
La calidad del aire a nivel local es mejor, sin duda, con menos o nulas emisiones difusas de contaminantes a nivel local. Ciertamente, las emisiones por unidad de superficie no se pueden traducir de forma simple en efectos sobre la calidad del aire, pues su posible transformación, retención o dispersión en la atmósfera está asociada a factores meteorológicos o topográficos, entre otros. Estos factores pueden atenuar la influencia de emisiones altas sobre la calidad del aire a nivel bajo de la atmósfera, pero también incrementar las de emisiones moderadas.
Así, por ejemplo, más de 1.500 chimeneas y una topografía desfavorable permiten registros preocupantes de calidad del aire en un municipio de 8.400 habitantes de Jaén, Villanueva del Arzobispo, según un reportaje difundido en La Sexta. En este lugar se han superado decenas de veces los 50 microgramos de partículas gruesas por metro cúbico de aire, el valor de concentración media diaria de PM10 establecido para este contaminante como límite para la protección de la salud. Sin embargo, este municipio pertenece a la clase de emisiones baja, según el modelo de la AEMA. Esta discrepancia indica, probablemente, un crecimiento del uso de biomasa en la calefacción, y las limitaciones de algunos modelos para ciertos casos particulares que, sin embargo, no desmerece las tendencias de emisiones. Subraya la conveniencia de evaluación con métodos complementarios.
Salud pública y contaminación difusa
La contaminación del aire reduce la esperanza de vida media 2,2 años en Europa. Casi 14 millones de personas respiraron aire contaminado en España, según el informe de calidad del aire de 2018 de Ecologistas en Acción. Teniendo en cuenta los efectos que tienen los contaminantes atmosféricos en la salud, conocer, controlar y mejorar la calidad del aire es una necesidad apremiante.
Las partículas en suspensión, los óxidos de nitrógeno y el dióxido de azufre son los contaminantes que presentan efectos más importantes en la salud, entre los considerados en el presente estudio. Las partículas en suspensión generan problemas respiratorios, como la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, y actúan como factor de riesgo para enfermedades cerebrovasculares y cardiovasculares.
Los óxidos de nitrógeno también se asocian con enfermedades respiratorias crónicas, afectando a los pulmones y reduciendo su funcionalidad. El dióxido de azufre está relacionado con problemas pulmonares y cardiovasculares, así como con el desarrollo de enfermedades respiratorias crónicas.
Con una utilidad práctica, para orientar y priorizar, se han clasificado los municipios según su vulnerabilidad a la contaminación difusa (ver mapa del visor). Se consideró de forma conjunta la distribución de las clases de emisiones (desde muy bajas a muy altas) y el tamaño de la población, obteniéndose diferentes categorías de vulnerabilidad, siendo esta mayor en los municipios con más emisiones y más populosos. Los resultados obtenidos indican que el 43% de la población española, más de 19 millones de personas, vive en municipios con una vulnerabilidad severa o extrema. Este porcentaje aumenta si se considera toda la población de municipios con alta o muy alta contaminación difusa: 16,4 millones, el 37% de la población española).
Si nos limitamos a la población de mayores (65 años o más), el 50% de la población (4,2 millones de personas) se encuentra en municipios de vulnerabilidad severa o extrema. Para la población infantil (menor de 5 años), el porcentaje de población en municipios de vulnerabilidad severa o extrema es el 36%.
Los municipios deben proteger la calidad del aire y la salud de sus habitantes. Nuestros resultados son valiosos para valorar y controlar las fuentes contaminantes difusas. Debe conocerse mejor cómo varía la contaminación del aire y qué factores geoespaciales determinan la exposición a este riesgo para la salud en el territorio municipal.
Mtr. Xabier Álvarez de Eulate, Investigador de la Fundación Matrix
Dr. Javier Montalvo, Profesor de Ecología de la Universidad de Vigo y Director de la Fundación Matrix
Artículo divulgativo del Proyecto IMPACTSIG, que forma parte del Programa PIET, subvencionado por el Ministerio para la Transición Ecológica. Está realizado por la Fundación Matrix, Investigación y Desarrollo Sostenible en colaboración con la Universidad de Vigo y la Universidad Complutense de Madrid.
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